El proyecto solar portátil para la Veredilla sigue paso a paso hacia su conclusión, cada vez más cerca, y nosotros cada vez más intrigados y nerviosos porque vemos el final ya no demasiado lejos.
Tras mi retorno a Rute el jueves pasado, donde ya se encontraba Goyo, hemos trabajado diariamente dedicando muchas horas a las diversas pruebas y puesta a punto de todos los sistemas, viendo autonomía de la estación, software de envío de datos a la red, trabajos con el modem USB estudiando mejorar la cobertura con antena exterior, funcionamiento de los reinicios y reconexiones, trabajos con el hardware de la Raspi y muchas cosas más.
Hay que tener en cuenta que todo tiene que ir como la seda ya que nadie va a poder encargarse de la estación in situ, y todas las tareas deben ser completamente autónomas.
Han sido realmente provechosos estos días, donde hemos estado supervisando todo hasta altas horas de la madrugada, cuando ya todo el mundo está acostado y podemos trabajar más a gusto, saboreando una copa de pacharán casero ruteño, con endrinas y anis de esta tierra.
Hemos discutido mucho sobre la instalación y al menos lo acordado hasta ahora ha sido instalar la estación en la aldea, buscando la mejor cobertura, quizá nuestro mayor problema. Aunque podríamos llevarla a cualquier otro sitio, nos parece mejor dejarla en los alrededores de la aldea porque podemos encargar a Teo y a otros visitantes de fines de semana que echen un vistazo a la instalación y siempre estar al tanto si hay algún problema. Aunque ellos puedan hacer poco o nada por arreglar algún problema informático, en caso por ejemplo de una nevada podrían limpiar de nieve la placa para que siguiera captando energía, o en echar una mano en casos de fuertes tormentas con mucho viento si hubiera algún destrozo.
El problema de la energía, que pensábamos que iba a ser el principal obstáculo, nos da la impresión que tras las pruebas realizadas estos días no va a ser lo más problemático. Tras probar la batería AGM de ciclo profundo de 35 Ah parece que vamos a tener energía para abastecer la estación sin problemas, o al menos eso es lo que nos parece.
El consumo de la Raspberry Pi B+ es bastante más reducido de lo teórico, ya que los 600 mAh cada hora no se llegan a consumir nunca, posiblemente porque la Raspi está en reposo sin efectuar tareas y solo debe mandar una plantilla con los datos meteorológicos cada 15 minutos. Hemos medido el consumo y la batería en unas 60 h ha pasado de 13,5 v a 11,9 v, o sea una caída de tensión de 1,6 v. El consumo no supera los 250 mAh Creemos que tendremos una autonomía de al menos 3 días sin carga, pero la placa siempre carga algo, incluso en días nublados o con lluvia.
Quizá lo más problemático sea la conexión a internet. La cobertura en la zona es crítica, y tendremos que usar una antena externa a la fuerza, ya que el modem hay que meterlo en una caja hermética junto al resto de componentes, con lo que dejará de captar la poca señal que llega. Llevaremos 2 antenas externas, una tipo bolígrafo y en caso de que no sea suficiente habrá que probar la de panel de 17 dbi.
El tema del acceso remoto también lo hemos estado trabajando, y aunque todo es mucho más complicado que cuando usas Windows, puedes acceder a la Raspi desde casa. Evidentemente todo aquí es a base de líneas de comandos, no hay pantallas de navegación ni nada por el estilo, y me da la sensación de volver a los años 80, cuando Windows aún no existía y solo había MS-DOS. Trato de ponerme al día en el tema, pero es un mundo nuevo para mí, pues no conocía de Linux nada más que el nombre.
Aunque es muy engorroso cualquier modificación, puedes acceder a las entrañas de la configuración de la consola de la estación y hacer modificaciones imposibles con Windows. Por ejemplo hemos preferido tener la información de la humedad interna (la de la consola) mejor que la del sensor exterior, porque nos informará de si ha podido haber alguna entrada de agua o condensación de humedad dentro de la caja donde irán situados todos los componentes.
Una vez elegido el sitio donde irá situada la estación, Goyo tendrá que pedir los permisos oportunos al dueño del terreno, y nos gustaría protegerla mediante una pequeña cerca de no más de 3x3 m, con su tela metálica para aislarla un poco de los curiosos. Todo esto habrá que tenerlo terminado antes de trasladar definitivamente todos los elementos, por lo que aún queda mucho trabajo por hacer.
Finalmente desistimos de situar la estación en una casa de la aldea, la placa es demasiado grande y pesada y no queremos arriesgarnos a que pueda ocurrir algo. La placa irá sobre el suelo, y habrá que fijarla muy bien pues con su resistencia al viento podría ser arrastrada por éste en caso de fuertes rachas, algo muy frecuente allí.
Mientras Goyo hace todos estos trámites, dejará la estación transmitiendo desde el pueblo, donde seguiremos supervisando su comportamiento. Una vez terminada la cerca será el momento de trasladar todo a su destino final, y dejarlo perfectamente situado. Yo compraré una caja hermética con llave donde meteremos todos los aparatos y viajaré al pueblo el día 26, algo ya seguro porque mi hijo David se ha ido con sus primos y tengo que recogerlo.
Una vez allí trataremos de dejarlo todo terminado, aunque no sabemos si nos dará tiempo. No queremos prisas de última hora, porque este proyecto lleva gestándose más de 1 año, y por unos días más no va a pasar nada. Las prisas son malas consejeras (refranito al canto) y si no lo vemos claro preferimos hacerlo en 2 etapas, y montar la estación en otro viaje. Mientras tanto estaría probándose desde el pueblo.
El tema informático también ha ocupado parte de nuestro tiempo, y ya tenemos página web para La Veredilla, donde todos podéis consultar los últimos datos de la estación. La página aún está muy verde, y habrá que hacer modificaciones y perfeccionarla poco a poco. Yo también estoy reciclándome en lenguaje HTML, que es el que se maneja en este tipo de páginas.
Los que queráis consultarla lo podéis hacer en
http://www.meteoveredilla.site90.net
En estos momentos Goyo se dirige hacia el pueblo, donde llegará esta tarde con 3 nuevos pollitos de gallinas de huevos azules que se sumarán a los 2 gallos y la gallina que allí hay y posiblemente esta noche deje ya la estación funcionando completamente autónoma con energía solar desde la zona del Río, junto al puente romano,, y podremos consultar sus datos en directo.
Enfín, como veis un trabajo realmente duro, pero la ilusión es lo importante. Sé que hay muchas personas siguiendo los avatares de la estación solar, e incluso Goyo me ha dicho que había hasta algún voluntario que estaba dispuesto a donar una pequeña aportación para sufragar parte de los gastos del proyecto, algo muy de agradecer. Realmente si hubiera 600 personas interesadas, con una aportación tan escasa como 1 euro, se podrían financiar los gastos así como los que habrá a partir de ahora, pues mantener la línea de internet no es gratis.
Otro tema que habrá que solucionar es el de la cobertura de la nueva antena omnidireccional, que no da señal a la zona donde se sitúa la estación del Río, en casa de los padres de Goyo. Habrá que intentar conectar las 3 antenas de forma simultánea para abarcar todas las zonas posibles del pueblo. Espero que Goyo pueda solucionar el tema y que Zafrilla Río vuelva a aparecer en las redes.
Ya seguiré informando debidamente a toda la gente interesada en el proyecto, y mandando imágenes en los próximos días.
Una vez elegido el sitio donde irá situada la estación, Goyo tendrá que pedir los permisos oportunos al dueño del terreno, y nos gustaría protegerla mediante una pequeña cerca de no más de 3x3 m, con su tela metálica para aislarla un poco de los curiosos. Todo esto habrá que tenerlo terminado antes de trasladar definitivamente todos los elementos, por lo que aún queda mucho trabajo por hacer.
Finalmente desistimos de situar la estación en una casa de la aldea, la placa es demasiado grande y pesada y no queremos arriesgarnos a que pueda ocurrir algo. La placa irá sobre el suelo, y habrá que fijarla muy bien pues con su resistencia al viento podría ser arrastrada por éste en caso de fuertes rachas, algo muy frecuente allí.
Mientras Goyo hace todos estos trámites, dejará la estación transmitiendo desde el pueblo, donde seguiremos supervisando su comportamiento. Una vez terminada la cerca será el momento de trasladar todo a su destino final, y dejarlo perfectamente situado. Yo compraré una caja hermética con llave donde meteremos todos los aparatos y viajaré al pueblo el día 26, algo ya seguro porque mi hijo David se ha ido con sus primos y tengo que recogerlo.
Una vez allí trataremos de dejarlo todo terminado, aunque no sabemos si nos dará tiempo. No queremos prisas de última hora, porque este proyecto lleva gestándose más de 1 año, y por unos días más no va a pasar nada. Las prisas son malas consejeras (refranito al canto) y si no lo vemos claro preferimos hacerlo en 2 etapas, y montar la estación en otro viaje. Mientras tanto estaría probándose desde el pueblo.
El tema informático también ha ocupado parte de nuestro tiempo, y ya tenemos página web para La Veredilla, donde todos podéis consultar los últimos datos de la estación. La página aún está muy verde, y habrá que hacer modificaciones y perfeccionarla poco a poco. Yo también estoy reciclándome en lenguaje HTML, que es el que se maneja en este tipo de páginas.
Los que queráis consultarla lo podéis hacer en
http://www.meteoveredilla.site90.net
En estos momentos Goyo se dirige hacia el pueblo, donde llegará esta tarde con 3 nuevos pollitos de gallinas de huevos azules que se sumarán a los 2 gallos y la gallina que allí hay y posiblemente esta noche deje ya la estación funcionando completamente autónoma con energía solar desde la zona del Río, junto al puente romano,, y podremos consultar sus datos en directo.
Enfín, como veis un trabajo realmente duro, pero la ilusión es lo importante. Sé que hay muchas personas siguiendo los avatares de la estación solar, e incluso Goyo me ha dicho que había hasta algún voluntario que estaba dispuesto a donar una pequeña aportación para sufragar parte de los gastos del proyecto, algo muy de agradecer. Realmente si hubiera 600 personas interesadas, con una aportación tan escasa como 1 euro, se podrían financiar los gastos así como los que habrá a partir de ahora, pues mantener la línea de internet no es gratis.
Otro tema que habrá que solucionar es el de la cobertura de la nueva antena omnidireccional, que no da señal a la zona donde se sitúa la estación del Río, en casa de los padres de Goyo. Habrá que intentar conectar las 3 antenas de forma simultánea para abarcar todas las zonas posibles del pueblo. Espero que Goyo pueda solucionar el tema y que Zafrilla Río vuelva a aparecer en las redes.
Ya seguiré informando debidamente a toda la gente interesada en el proyecto, y mandando imágenes en los próximos días.
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