Hace pocos días se dio a conocer la noticia de que la temperatura mínima más baja jamás registrada en el planeta Tierra había sido batida. Los -89,2ºC medidos el 21/7/83 en la base Vostok parece que podían pasar a la historia.
Analizando los registros termográficos recogidos por el satélite Landsat en la zona antártica de Dome Fuji, que ya se suponía que debía ser más fría que la zona de Vostok por estar aún más elevada (sobre los 3800 m), el 10 de agosto registraron una temperatura de -93,2ºC. Estos registros se recogieron en al año 2010 y tras su riguroso análisis se llégó a esta conclusión y hace pocos días se dio esta noticia.
Pero la Organización Meteorológica Mundial ha dejado claro que la temperatura del aire se mide de acuerdo a unas normas y estándares, a la altura de dos metros sobre el suelo, con una garita, como lo hacen las estaciones de observación meteorológicas. Por lo tanto, una temperatura medida por teledetección no es realista y debe ser contrastada por otra equivalente medida oficialmente.
La OMM no las considera temperaturas oficiales.No es correcto declarar una temperatura récord basado en datos de satélite. Los satélites como AVHRR y MODIS están midiendo la denominada "temperatura de brillo" que irradian las superficies emisoras. Todo lo que no se correlaciona completamente con verdaderas condiciones meteorológicas deben ser confirmadas por observaciones en el terreno.
Así que hasta que no se mida por métodos tradicionales la temperatura, el récord de la base Vostok de -89,2ºC se mantiene.
Esto también es válido para la temperatura máxima registrada en la Tierra con 70,7 ° C medida por MODIS en julio de 2005 en un lugar remoto en el desierto de Lut de Irán.
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