Aemet Rute se traslada a su nueva ubicación.

La estación Aemet de Rute por fin ha completado su proceso de traslado que se inició hace más de un año tras la muerte de nuestra querida amiga y siempre recordada Victoria.

Como ya he ido contando en otras entradas, tras la desaparición de Victoria, la estación meteorológica quedaba en una situación muy precaria pues aparte de estar en terrenos que eran propiedad de los herederos, no había ninguna persona que estuviera dispuesta a asumir la tremenda responsabilidad que supone tomar los datos de la estación diariamente y enviarlos a Aemet.
                                                                                                                                                         Antonio Navajas, gran aficionado a la meteorología y amigo íntimo de Victoria,  conocía perfectamente el funcionamiento de la estación pues Victoria se lo había enseñado, así como el complejo proceso de la toma y envío de datos. Desde entonces, él se ha quedado como responsable de todo este proceso, y ha sido el artífice principal para que la estación no se pierda, algo que podía ocurrir si no se encontraba un lugar adecuado.

Él ha movido todos los hilos necesarios con el Ayuntamiento de Rute para que se buscara un lugar idóneo, incluso ofreciendo su propia casa, que lamentablemente no cumplía con los duros   requisitos exigidos por Aemet.

Finalmente, después de valorar varios sitios, se optó por una parcela detrás de la cooperativa, que como se puede ver en las fotos, está a la salida del pueblo, bastante cerca de la anterior ubicación, aunque más en el entorno urbano y a menos altura. Antes la altura era de 642 m y ahora se sitúa a 610 m. La distancia no es mayor de 500 m entre ambos emplazamientos, aproximadamente la misma que hay con la estación PCE. Habrá que ver el comportamiento de las temperaturas en la nueva ubicación, aunque parece que las mínimas seguirán algo más bajas al situarse junto a un extenso olivar.

Aprovechando el traslado, la estación ha sido sometida a un detenido proceso de limpieza de todos sus componentes, algo que también hay que agradecerle a Antonio, y todos sus instrumentos lucen como el primer día. También la garita y el pluviómetro han sido pintados y la verdad es que las imágenes muestran la estación como nueva, con su blanco inmaculado y su nuevo emplazamiento vallado para evitar curiosos y amigos de lo ajeno.

Antonio va a quedar como responsable de la estación, ya que el propietario de la parcela donde está situada está delicado y no se va a poder ocupar de ella durante algún tiempo.

Desde aquí felicitamos a Antonio por todo su trabajo y esfuerzo, que ha llevado a que la estación Aemet de Rute, que desde el año 1971 recoge datos de forma ininterrumpida, no se pierda y mantenga su actividad durante muchos años más.

 En mi próximo viaje al pueblo le haré una visita y lo felicitaré personalmente.