Comienza el espectáculo

La masa de aire siberiano ya la tenemos instalada en nuestro país. Ha comenzado a entrar por el noreste y ya ha dejado mínimas de -20ºC en zonas de alta montaña . Eso unido a las rachas de viento, la sensación térmica, de la que ya hemos hablado en alguna ocasión, puede llegar a superar los -30ºC.

Si analizamos la variación de la sensación térmica según la temperatura y el viento, para mínimas de -15ºC y rachas de viento de 40 km/h, la sensación es de -37,5ºC. Estos guarismos serán perfectamente posibles en zonas como La Veredilla y zonas altas de la Serranía Zafrillense y del resto del Ibérico.

Las rachas de viento más intensas precisamente  se han ido a la zona del Ibérico, superándose los 100km/h en Cedrillas, Mosqueruela o Jabaloyas.

En Zafrilla hemos medido rachas de 63 km/h, al igual que en La Veredilla, que han hecho que se destruya el anemómetro y actualmente no tenemos datos de viento. Tenemos uno de reserva pero habrá que esperar bastantes días hasta sustituirlo. Esperemos que sean los únicos daños que tengamos que lamentar.

Las mínimas no han sido demasiado bajas esta madrugada pero ya ha comenzado a entrar ese aire siberiano y las máximas no han pasado de 0ºC en el pueblo o de -1,5ºC en La Veredilla. Y la caída ya ha comenzado.

Actualmente, cuando son las 16h30', la Veredilla ya roza los -4ºC, y esto no ha hecho más que empezar. Es muy posible que antes de medianoche se haya roto la barrera de los -10ºC, realmente apasionante.

Además ayer nevó débilmente y el suelo se mantiene nevado, con lo que los efectos serán aún mayores. En las zonas de solana se ha derretido, pero no en las zonas protegidas del viento y el sol, donde se sitúa la estación.

En el resto de la Península mañana amanecemos bajo cero en casi todos los sitios. Incluso en zonas de costa se podrían registrar guarismos negativos. Y lo mejor es que para el fin de semana se anuncian nevadas en cotas muy bajas, incluso a nivel del mar en el sur. Se podrían ver estampas que hacía muchos años que no veíamos.

Atentos con los móviles para tomar esas instantáneas para el recuerdo.

Realmente apasionante esta advección fría, que nos mantiene pegados al ordenador viendo la caída en picado de las mínimas desde este momento.

Dicho esto diremos que solo es un juego de niños comparado con lo que les ha caído y les está cayendo al centro y este de Europa.

Pero es un juego la mar de divertido. Y lo vamos a disfrutar.