Como bien dice el dicho popular conocido por todos, después de la marea de polvo sahariano, que la verdad no fue para tanto, han vuelto las tan necesitadas lluvias. La verdad es que lo del polvo africano, en el buen sentido de la palabra, no ha sido para tanto. Ha dejado algunas imágenes en la península curiosas, con ese manto amarillo-anaranjado cubriéndolo todo, pero por aquí la verdad es que no se ha notado demasiado. Quizá el viento tan desagradable que comenzó el viernes, y que rozó los 70 km/h en algunos momentos, se llevara los polvos para otro lado. Y desde ayer nos ha visitado una depresión primaveral que ha dejado unos chubascos muy dispersos y no demasiado abundantes pero realmente bienvenidos. Ayer se recogieron en la capital en torno a los 3 l/m2 y hoy ha caído algo más de agua, algo más del doble, y en algunos momentos puntuales realmente ha llegado a arreciar tanto la lluvia como el viento, para instantes después abrir el cielo y salir un sol que picaba. Así hemos estado todo el día de hoy, con un tímido sol que rápidamente se ocultaba y caía la del pulpo. Hemos estado visitando la feria de Mayo y la verdad es que era divertido salir corriendo a buscar una caseta donde refugiarse porque había empezado a llover de lo lindo. Han sido chubascos muy irregulares y dispersos pero que como te cogieran en mal sitio te ponían empapado.De todas formas eso no ha impedido que la feria estuviera muy animada y en cuanto escampaba todo el mundo salía de sus refugios para buscar otro sitio donde tapear y bailar sevillanas, rumbas, salsa o lo que se terciase. Hoy hemos tenido temperaturas peimaverales, con una máxima que no ha llegado a los 18 grados y 11 de mínima, siendo un poquito más fría en Trassierra con algo más de 9 grados, realmente un lujo para estas fechas..
A partir de mañana las cosas mejorarán rápidamente y la semana que viene comenzará de nuevo el calorcito, aunque sin llegar a los extremos agobiantes de días pasados, con 34 grados que tenemos previstos ya vamos bien servidos. A finales de la semana que viene, nuevamente los cielos se encapotarán de nuevo y es posible que caiga algún chubasco para el domingo que viene, último día de feria, aunque todavía falta mucho para eso y las previsiones pueden cambiar.
Así que el que nos quiera visitar y disfrutar de la Feria de Nuestra Señora de la Salud siempre será bienvenido.
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